El señor no te gusta por tus malas acciones, te juzga por tu terquedad de no regresar al camino, de darle la espalda a él, de seguir perdiendote, olvidando que tienes un banquete en casa de Papá, dónde ve tus posibilidades, tus talentos, tus dones. Te recibirá con los brazos abiertos. Amén www.ministeriosanpablo.com #regresa
Que debemos hacer en medido de la prueba, cuando estamos en el fondo del pozo,…
Daniel, un joven escogido, procuraba seguir al Señor. Dios le concedió el don de ciencia,…
No te olvides de tu sacerdote, un arrocito, un postre un refresco. Escrito está que…
El don de pobreza de los franciscanos se describe en Ezequiel. La única heredad o…