Buenos días en Ap 7,14 dice: «Esos son los que vienen de la gran tribulación; han lavado sus vestiduras y las han blanqueado con la sangre del Cordero». Lávame Señor con tu sangre, quita la mancha que tengo, se maestro mi guía, permíteme seguirte aún con todo mi pecado. Amén
Lávame con tu sangre
