Rogelio Segura Chen
Todos y todas algunas veces nos hemos equivocado en la vida, lo importante es aprender, algunas veces lloramos; pero al final somos los más fuertes. Nunca es tarde para darse cuenta que hemos cometido ese error dos veces, y poder rectificarlo. Nos podemos equivocar muchas veces en la vida, pero que no se convierta en un fracaso hasta que se empiece a culpar a otros por nuestros propios errores. ¿Cuántas veces nosotros nos hemos equivocado, pero nunca buscamos la solución en el fondo de un vaso? Alguna vez nos hemos puesto a meditar y reflexionar sobre lo sucedido y decir “Oops me equivoqué cómo nunca” A veces cuándo nos equivocamos no somos capaces de pedir disculpas. ¿Te cuesta pedir disculpas cuándo te equivocas? Quiero decir que todas y todos nos equivocamos, los errores son parte de nuestra vida, y nos brindan la oportunidad de ser mejores personas, aprendiendo de la experiencia y aceptando las consecuencias. Por querer siempre aprender, por eso nos equivocamos, debemos reconocer que nos equivocamos, rectificamos y por rectificar crecemos. Si cometemos un error, no perdamos el tiempo inventando excusas y lamentándonos; intentemos nuevamente hacer algo para arreglarlo. Cuándo tenemos la felicidad completa, porque siempre nos equivocamos en las decisiones que tomamos, por la ignorancia volvemos a equivocamos y por las equivocaciones aprendemos. Nunca digamos «No me va a pasar», la vida tiene una manera divertida de demostrar que nos equivocamos, y no nos hace menos valiosos, ni menos sensatos, ni menos dignos. Muchas veces por la ignorancia nos equivocamos y por las equivocaciones nos cuesta admitirlo. Debemos siempre a perdonar, recordemos que nadie es perfecto, todos y todas nos equivocamos y siempre necesitamos del perdón. Los errores y no horrores tienen tres partes: aceptarlos, superarlos y no volver a cometerlos, un error es una excelente oportunidad para aprender y avanzar eso se llama pedagogía del error. Seamos humildes para admitir nuestros errores, inteligentes para aprender de ellos y valientes para corregirlos. Bruce Lee decía: “Los errores se vuelven olvidarles, si tienes el coraje de admitirlos” Lo peor de cometer errores es no aprender de ellos. ¡No malgastemos un buen error, más bien aprendamos de él! ¡Debemos aprender de nuestros errores, pero no debemos apoyarnos en nuestros éxitos pasados! ¡Aprender es equivocarse, equivocarse es aprender! Amigos y amigas debemos aprender a perdonar porque nosotros también nosotros nos equivocamos y debemos saber reconocer nuestros errores, y no nos hace valer menos que los demás. Paz y bien porque un error lo comete cualquiera, reconocerlo y mejorarlo lo hacen pocas personas y no hay nada que enseñe más que equivocarse.